Huellas

Los pasos dados en la arena
apenas dejan huellas:
el viento y el mar
se encargan de borrarlos.
Nada quedará para la historia
de nuestro transitar
por sus dunas.
Nada de nosotros permanecerá
sobre su piel.
Ni tan siquiera un leve recuerdo
de nuestra presencia.

***

Las plumas desprendidas
de las gaviotas
escriben sinos sobre la arena,
indescifrables para unos ojos iletrados
en la abnegación del asceta,
y dejan su mensaje de efimeridad
al envite de unos pies desaprensivos.

*

Las olas, una vez tras otra,
lamen su cuerpo erosionado,
bendiciéndolo con el rasante
obsequio del olvido:
aquel que nos impide perdurar
en los días venideros,
como contorno grabado
o como cicatriz,
sobre su soleada epidermis.

Huellas

Deja un comentario